Actualmente, los amortiguadores modernos utilizan aceite de silicona, el cual tiene una viscosidad controlada. Si la viscosidad del aceite cambia, se afecta el rendimiento del amortiguador y, por ende, el movimiento y velocidad del vehículo. Este parámetro llamó la atención de Renata Ibáñez, estudiante del tercer año del Bachillerato Internacional 5 de Mayo de la BUAP, quien diseñó y fabricó un viscosímetro casero para medir la adherencia de las moléculas que componen los fluidos, lo cual incide en una mayor o menor resistencia de circular.
La construcción de este dispositivo surgió a raíz de su interés por el área automotriz y la realización de un trabajo escolar de investigación, lo cual promueve el bachillerato entre sus estudiantes para inculcar vocaciones científicas. Con ayuda de su profesor fabricó un prototipo que consta de placas paralelas que se introducen en el fluido.
“En los resultados de tres pruebas se obtuvieron cambios significativos de velocidades: conforme se hace más viscoso, la placa tiende a disminuir su giro y velocidad y con eso interpretamos que aumenta la viscosidad en el fluido. Recordemos que la viscosidad es la resistencia a fluir”, expuso. En este experimento se utilizó una concentración de 30 por ciento de partículas en una sustancia de 4.5 mililitros.
Renata Ibáñez tiene especial interés por las ciencias exactas, en particular por Matemáticas y Física. Con ayuda de sus profesores se dio cuenta que podía incursionar en la investigación y aportar a la ciencia, por lo que hoy pretende estudiar Ingeniería Aeroespacial.
Actualmente es líder del club de astronomía de este bachillerato, donde promueve la astronomía y astrofísica. También participa en la organización de la Noche de las Estrellas, del cual el Bachillerato Internacional 5 de Mayo es una de las sedes oficiales de esta actividad.