El cierre de la autopista Tlaxcala–Puebla surgió de una disputa por quién participará en la ampliación de la carretera operada por Pinfra, un proyecto que ha generado tensiones entre sindicatos. La inconformidad creció cuando trabajadores acusaron quedar fuera de los contratos, lo que detonó el enfrentamiento de este miércoles y terminó con maquinaria incendiada y el tránsito detenido.
Los manifestantes colocaron camiones y llantas en llamas para presionar su inclusión en las obras, provocando la suspensión total del paso vehicular durante varias horas.
En la disputa se mencionó a la CTM y a la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México, aunque hasta el momento ninguna organización ha explicado su intervención.
Leobardo Soto, dirigente de la CTM, se deslindó del bloqueo y afirmó que su gremio solo pidió formalmente que se respetaran condiciones laborales en el proyecto.
El cierre concluyó tras cinco horas, pero el conflicto laboral sigue abierto y podría generar nuevas protestas si no se resuelve la asignación de trabajos en la ampliación carretera.
