Nada sorprende ya de los gobiernos de Morena y la “justicia” impartida en la era de la Cuarta Transformación, peor si se trata de procurarla e impartirla en Ciudad de México. Ayer una Sala del Tribunal Superior de Justicia de CdMx ratificó la resolución de un juez que deja en libertad al depredador sexual de menores, el morenista ex diputado federal poblano Saúl Huerta.

Acusado y detenido cuando éste era legislador federal por el Distrito 11 de Puebla, por el delito de abuso sexual contra por dos menores de edad que lo denunciaron, solo fue sentenciado a tres años cuatro meses de prisión, misma que se la conmutaron para cumplirla en libertad.

Seguirá en prisión porque la justicia de CdMx prepara una segunda sentencia por otro caso similar de abusa sexual a menores, con el mismo beneficio de sentencia con libertad.

El abuso sexual a menores de edad, con el agravante de tratarse de un parlamentario mexicano, solo le fue aplicada una reparación del daño por la cantidad de 18 mil 960 pesos, ni una cuarta parte de lo que ganaba al mes como legislador de Morena.

Y pese a la gravedad del hecho, la hipocresía de la “izquierda” de la que se presumen en Morena, no hizo ni un solo pronunciamiento, lo que los convierte en encubridores de ese depredador sexual.

Para mejor muestra de la impunidad y la protección a la pedofilia y a los pederastas en México, la Sala del TSJCDMX resolvió que Saúl “H” no quedará inscrito en el Registro de Agresores Sexuales de Ciudad de México, en virtud de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación consideró este instrumento como inconstitucional.

Este hecho ocurrido en 2019 y que fue un escándalo político-electoral durante las campañas electorales federales de 2021 para renovar la Cámara de Diputados, parece quedará en la impunidad y en el olvido, pese al agravio a las víctimas y a sus familias.

En Puebla es la vergüenza por este tipo de casos, y la justicia lo echa a la calle para seguir cometiendo estos delitos sexuales en agravio de menores de edad, con la garantía de que tiene en Morena y el los gobiernos de la 4T, todas las garantías de impunidad.

Saúl Huerta figura en la lista de pederasta denunciados y acusados que fueron protegidos por la justicia local.

Así ocurrió en Tehuacán con el cura pederasta Nicolás Aguilar quien abuso de niño en una junta auxiliar de ese municipio, y en la diócesis de Los Ángeles, California, donde fue enviada por la jerarquía católica mexicana para protegerlo.

El ministerio público de la época protegió al sacerdote pedófilo, por la intervención del entonces Arzbispo Rosendo Huesca y el Cardenal Primado de Ciudad de México, Norberto Rivera Carrera.

Pero la historia de personajes públicos del Puebla involucrados en actos de pedofilia se extendió con el escándalo de protección del ex gobernador Mario Marín Torres quien ordenó detener, torturar y encarcelar a la periodista Lydia Cacho por la publicación de su libro sobre pederastia.

La publicación del libro “Los Demonios del Edén” hizo alusión a empresarios poblanos, entre ellos al textilero Kamel Nacif Borge, de ser parte de una red de turismo sexual de pedófilos que abusaban de niñas y niños en Cancún, Quintana Roo.

Marín Torres sigue preso en un penal del Altiplano acusado por el delito de tortura contra la periodista, y carga el ex mandatario poblano con el estigma de estar ligar a la red de pederasta y depredadores sexuales de menores, como lo es el diputado federal ex priista y luego morenista, Saúl Huerta.