La “democracia sindical” en el SNTE, donde podrán elegir 120 mil maestros a sus dirigentes mediante el voto libre directo y secreto, no es un conquista de la lucha magisterial, es un capítulo exigido por EU y Canadá a México, en el marco de la firma de acuerdo comercial T-MEC.
Si fuera por Carlos Jonguitud Barrios (+) y Elba Esther Gordillo Morales, hubieran mantenido su cacicazgo para seguir reeligiendose, al igual que los 61 dirigentes secciónales del SNTE, a través de congresos y convenciones electorales amañadas y antidemocráticas para imponerse.
Por fortuna para los maestros esas vetustas prácticas caciquiles han sido desterradas porque los maestros podrán elegir a sus dirigentes mediante el voto libre, individual y secreto en las urnas, como ya ha ocurrido en algunas secciones del SNTE.
Después de 80 años de imposiciones, el magisterio poblano, al igual que el resto del país, acudirán el 28 de marzo a los centros de votación para mediante el voto secretario elegir al secretario general y a los miembros de los respectivos comités ejecutivos seccionales.
El SNTE cuenta con 61 secciones sindicales con un padrón de 1 millón 620 mil afiliados; de éstos, 83 mil maestros son activos, de éstos, 18 mil son jubilados.
De la sección 51 son 36 mil de la sección 51, y ocho mil jubilados, que en total son 120 mil trabajadores de la educación quienes acudirán a votar el 28 de marzo en sus respectivos centros de trabajo.
A partir del 7 de marzo empieza el registro de planillas a los respectivos comités ejecutivos de las secciones 23 y 51.
Los dirigentes sindicales magisteriales electos estarán en el cargo del 1 de abril de 2023 al 31 de marzo de 2027.
Hay una efervescencia electoral en el sector magisterial y las pasiones se han desbordado entre los principales grupos políticos tradicionales ligados a Elba Esther Gordillo, así como el surgimiento de liderazgos independientes, lo que convertirá en campañas y elecciones muy competidas.