Julia Abdala Lemus, la ex reportera y empresaria poblana libanesa, dio la cara para responder a los señalamientos de estar involucrada en el presunto blanqueo de 4.5 millones de dólares. Un reportaje de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) exhibió distintas transferencias de miles de dólares a cuentas bancarias de Abdala.
MCCI relacionaron estos depósitos con la empresa de Samuel Weinberg López y Jonathan Alexis Weinberg Pinto, supuestos testaferros de Genaro García Luna.
En entrevista radiofónica con Ciro Gómez Leyva, quien fue su jefe y compañero de conducción en le Canal 40 de TV por cable, la poblana Abdala Lemus hizo varias precisiones.
En primer lugar, reconoce una relación sentimental de 26 años con “Manuel” Bartlett Díaz; la amistad de años con Silvia Pinto de Weinberg, “amiga querida”, y niega cualquier vínculo o relación con Genaro García Luna, preso en Estados Unidos con sentencia de cadena perpetua.
Consideró como una expresión de misoginia en su contra el relacionar sus actividades económicas y de negocios con su pareja, el poderoso político mexicano “ex” de Gobernación federal, ex gobernador de Puebla, ex senador y ex director de la CFE en el sexenio de Manuel López Obrador.
Se autodefinió Julia Abdala como una empresaria con negocios internacionales, y reconoció las transferencias bancarias de la empresa de Nunvav en el Occidental Bank de Barbados, propiedad de Samuel Weinberg López.
Esos depósitos a sus cuentas para un total de 4.5 millones de dólares, aseguró, corresponde a la venta de un Hotel Boutique de Polanco, en Ciudad de México, a la familia Weinberg Pinto, que realizó el pago durante cinco años.
El edificio de Polanco dice que lo compró hace años, cuando Manuel Bartlett no ocupaba ningún cargo púbico, inmueble que estaba en ruinas y lo remodeló para para que sirviera como hotel y joyería.
Respondió la poblana a las operaciones bancarias investigadas por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) a través de la Comisión Nacional Bancaria de Valores (CNBV) a solicitud de un juez de Florida, pero aclara que nunca ha sido requerida por la UIF o alguna autoridad judicial.
Autoridades de EU y México busca recuperar millones de dólares que García Luna trianguló con la compañía Nunvav, de Weinberg López, investigada de presunto “lavado de dinero”.
Abdala Lemus le dijo a Gómez Leyva que el reportaje de MCCI “es un montaje” con fines políticos para atacar a “Manuel” Bartlett Díaz.
Reconoció la existencia de las inversiones Offshore a través de la empresa de su propiedad, Roybell International Inc en el Union Bancaire Privée, un banco radicado en Suiza, misma que canceló.
Se trata de dinero de origen lícito relacionado con sus actividades comerciales y de negocios internacionales, recursos ajenos al interés público (erario federal).
Julia Abdala –ex reportera de El Heraldo de Puebla y Canal 40– manifestó que no accedió a la entrevista con el reportero de MCCI porque “era un desconocido”.
Pareja de Bartlett Díaz desde 1999, la ex reportera convertida en una empresaria exitosa con capacidad para comprar un edificio en Polanco en CdMx, invertir en un banco de Suiza y tener negocios internacionales, remató en entrevista:
“Hay misoginia en los señalamientos en mi contra porque parece que no puede ser ella (como mujer) sin ser apéndice de un hombre”, con “Manuel” (Bartlett) “solo hay una relación sentimental, y no dependo de él en mi actividad económica”.
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