Los Rivera Vivanco es “una familia común viviendo al día, esforzándonos mucho para ir construyendo nuestro propio patrimonio, y yo soy la mayor de seis hermanos”. Destaca Claudia Rivera Vivanco en un video subido a su página de face cuando se desempeñaba como alcaldesa de la ciudad capital:
…“Tras la pérdida de mi papá me tocó madurar antes como mujer como persona, a todos mis hermanos y a mis hermanas también, y eso nos llevó a tener que apoyar más a mi mamá para salir adelante”. “Soy Claudia Rivera, #SoyMorena y esta es mi historia”.
Y sí, la familia Rivera Vivanco ha hecho historia al amparo del movimiento de la “Cuarta Transformación” de Morena, donde han encontrado desde que fue alcaldesa, un modo de vida la hacer del partido Morena un negocio familiar.
A sus 36 años, Rivera Vivanco se convirtió en la segunda mujer en desempeñar el cargo de presidenta municipal de Puebla.
Ganó la elección en 2018 con la coalición “Juntos Haremos Historia”, conformada por los partidos Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Partido del Trabajo (PT) y Partido Encuentro Social (PES).
Fundadora en Puebla Movimiento Regeneración Nacional Morena, cumplió una labor importante dentro de la Asamblea Estatal Constitutiva en Puebla para reunir más de 160 mil firmas en apoyo a al partido creado por Andrés Manuel López Obrador.
Pero al llegar a la alcaldía poblana, los seis hermanos de Rivera Vivanco y ella encontraron en el partido de la “esperanza” y en el movimiento de la “Cuarta Transformación” su modus vivendi, para dejar de ser pobres y vivir de los privilegios del poder público y político; antes de “primero los pobres”, primero ellos.
Esto ha sido posible para el “clan” Rivera Vivanco, gracias al modelo patriarcal y al padrinazgo de Bertha Elena Luján Uranga, de la cúpula nacional de Morena.
Luján es la esposa del abogado laborista Arturo Alcalde, madre de la titular de la Secretaria Gobernación Luisa María Alcalde, involucrada en el “moche” de los $50 millones de Notimex a la campaña de Sheinbaum.
Con Eloísa Vivanco a la cabeza, integrante del movimiento de la 4T, desde la Comisión de Honor y Justicia en Morena, dejan la casa humilde del barrio de San Miguelito para vivir de los privilegios que ofrece “servir” o servirse de los pobres.
Para la familia Rivera fue una suerte acceder al poder público, gracias a que Claudia Rivera Vivanco ganó en un volado, en 2018, la candidatura a la alcaldía poblana.
La vida le cambió a la familia en la orfandad, al encontrar empleo, opulencia y privilegios en el ejercicio del poder público municipal.
De una humilde empleada del Inegi, “Claus” y su familia encontraron una mina de oro anual: 4 mil 609 mdp del presupuesto anual, solo en 2021; más los ingresos propios y del ambulantaje, más un sueldo mensual de $117 mil 658.
Además de los hermanos, amigos de su juventud fueron altos funcionarios en su gobierno municipal, entre ellos Israel Román Romano, Andrés García Viveros y Pamela Galindo Jiménez; hubo para dar y regalar a familiares y allegados.
Ahora, en este 2024, el “clan” familiar con “Claus” va con todo, incluida su pareja sentimental, en la búsqueda de repetir en el cargo de alcaldesa, y se extienden hasta las diputaciones locales.
Alentó a Rivera esta aventura luego del malogrado sueño de pretender ser la abandera a la gubernatura, anunció que hizo público a mediados de 2023; las ambiciones familiares ya no tenían ningún límite.
El 10 de noviembre de 2023, en Ciudad de México, el Comité Nacional de Morena dio a conocer los resultados de las encuestas resultando ganador Alejandro Armenta Mier, con el 22.3% de las preferencias; mientras que Rivera Vivanco obtuvo el 11.9% de las preferencias, siendo la mujer mejor posicionada en Puebla, lo que la motivó a repetir en la alcaldía, pese a sus negativos.
Afianzado el nepotismo, privilegios y poder con Eloísa Vivanco en la Comisión de Honor y Justicia en Morena, y María Teresa Rivera Vivanco, como consejera estatal, van por más en esta elección.
María Teresa aspira ahora a una diputación local o federal, en su defecto han planteado como alternativa su incorporación al próximo gabinete estatal. Ya le encontraron el caminito.
Pero además el “clan” busca colocar a David Rivera Vivanco, consejero estatal, como aspirante a una diputación federal o local, en el distrito 9.
En este negocio de nepotismo político en Morena y la 4T, el “clan” ha perfilado a Roberto Zataraín Leal, pareja sentimental de Claudia, candidatura a diputado local por el distrito 10; Zataraín no es militante de Morena y su origen es de pura sepa morenovallista.
Pero también hay bisnes para sus amigos: a Israel Román, Andrés García y Pamela Galindo los promueve como aspirantes a regidores en la ciudad capital.
La familia Rivera Vivanco abrazó la causa de “primero los pobres”, y se colocaron en el primer plano para hacer de Morena un negocio familiar.