Con casi la totalidad de políticos opositores y ex funcionarios públicos fuera de prisión, perseguidos judicial y políticamente, y sin aclararse el “hoyo financiero” de más de 3 mil millones de pesos, el gobierno estatal rindió homenaje a Miguel Barbosa, a un año de su muerte.
El gobernador sustituto Sergio Salomón Céspedes presidió la ceremonia por el primer aniversario luctuoso del ex mandatario de quien destacó “su compromiso por combatir la desigualdad y buscar el bienestar de la población”.
En compañía de integrantes del gabinete estatal, el titular del Ejecutivo manifestó que el Gobierno del Estado “reconoce y honra la memoria” del exmandatario.
Aseguró Céspedes que el difunto gobernador morenista “sentó las bases para consolidar la Cuarta Transformación “en Puebla a lado del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
La ceremonia se realizó en el contexto del proceso electoral para renovar la gubernatura donde la viuda del ex gobernador, Rosario Orozco, pretendió obtener la candidatura de Morena, ella y los barbosista en el gobierno sustituto, fueron derrotados por Alejandro Armenta, adversario de Barbosa.
A un año del gobierno sustituto que esta semana dará el “primer informe de gobierno”, se mantiene en la congeladora la indagatoria para esclarecer el desfalco financiero en el gobierno estatal durante la gestión de Barbosa Huerta.
El daño patrimonial a las finanzas públicas supera las tres mil 500 millones de pesos, en entre estos, los 600 millones de pesos que la destituida secretaria de Planeación y Finanzas perdió en una inversión dolosa en un banco en quiera e intervenido por la SHCP.
