Andrés Manuel López Obrador, el presidente de las eternas campañas electorales, encontró la horma de sus zapatos, y la de sus corcholatas, con la irrupción de la senadora Xóchitl Gálvez Ruiz.
Indígena de origen, hidalguense, empresaria emprendedora, egresada de la UNAM y con formación ideológica como militante de izquierda en la Liga Obrera Marxista (LOM), Gálvez es quizá la mejor carta y apuesta de los partidos de oposición como candidata presidencial.
Se trata de la legisladora federal que ha sido parte del gabinete federal en asuntos indígenas en el gobierno de Vicente Fox, candidata a la gubernatura en el estado de Hidalgo, jefa delegación en la Miguel Hidalgo en CdMx.
No milita en ningun partido político pero es senadora por del PAN, la misma que se encadenó a una silla para impedir el mayoriteo de Morena para aprobar el Plan B de la reforma electoral, la misma que fue a tocarle la puerta al presidente en Palacio Nacional para reclamar su derecho de réplica, por alusiones desde la “mañanera”.
Con la adelantada sucesión presidencial iniciada por las “corcholatas” del gobierno de la 4T, mismas que han perdido prevalencia en la conversación nacional y los reflectores en los medios tradicionales, la oposición decidió jugar en la misma cancha de López Obrador, es decir, en la ilegalidad electoral.
Y para que la cuña apriete… el grupo opositor le ha perfilado como una fuerte contendiente presidencial a la senadora Xóchitl Gálvez, quien le ha ganado y le pelea al presidente López Obrador la audiencia y el mayor tráfico como tendencia en las redes sociales.
Usando las propias palabras de titular del Ejecutivo federal, Xóchitl Gálvez le cae como anillo al dedo a la oposición para hacer frente a la rijosidad del discurso presidencial de las descalificaciones desde la mañanera.
La senadora hidalguense le ha dado respuesta en el mismo tono y con la misma enjundia a los señalamientos del presidente, porque Xóchilt no es nada dejadita ni calladita.
Y por lo visto le ha respondido una a una al inquilino del Palacio Nacional y a sus intelectuales orgánicos de la 4T como fue el caso de Epigmenio Ibarra, el creador de productos audiovisuales que hacen apología de los “narcos”.
Xóchitl, dicho de manera coloquial y respetuosa, es una “peladita”, se le da el “buen francés” para responder del tu al tú, y perdón por la comparación pero la hidalguense en un excelente “corcholata”, si la compara con el personaje de la desaparecida actriz Carmen Salinas, “La Corcholata” en la cinta “Bellas de noche”, dirigida por Miguel Delgado.
Están advertidos en el partido oficial Morena-gobierno, se les apareció “el diablo”, y para la campaña constitucional vendrán los contrastes y resultados en una competencia presidencial entre dos mujeres. Se pondrán buenas las campañas electorales en 2024.