TEHUACÁN.- En medio de la pandemia, María Luisa González Flores se abre paso para seguir recorriendo las rutas que a lo largo de 30 años ha marcado en distintos puntos de esta ciudad y así seguir con el oficio que inició al lado de su esposo, la venta de flores.
A sus 69 años de edad, María Luisa, originaria de La Costa, comunidad cercana a Ciudad Mendoza, en Veracruz, viene a Tehuacán tres veces por semana después de surtirse de flores que compra en el mercado de Orizaba, donde dice que hay varios puestos que venden flor que proviene en Atlixco, Puebla, Ciudad de México y varios lugares del estado de Veracruz, “donde la abundancia de agua favorece la siembra de diversas plantas de ornato”, señala.
Con “su carga”, se dispone a vender las flores en Tehuacán.
Antes, María Luisa se traslada a su domicilio donde hace pequeños ramos de girasol, rosas, claveles, nube, nardos, gladiolas, e incluso flores silvestres que se recolectan en el campo, entre otras que mezcla para tener una atractiva combinación de colores y así despertar el interés visual de los clientes.
Ataviada con el traje típico de su comunidad, que consta de una blusa bordada y la falda que forma con un lienzo de paño negro, aborda el autobús en Ciudad Mendoza, el cual la traslada a esta ciudad, donde desciende a la altura del rastro de aves, a la entrada de Tehuacán, y desde ahí, con tres bultos de flores que carga con su rebozo, inicia su recorrido.
Lunes abarca las colonias Tepeyac, Colosio y El Edén, así como fraccionamientos que hay en este trayecto, donde asegura que termina la flor.
El miércoles, que es otro de los días de venta, recorre las colonias Hiizachera, Aeropuerto y parte de la inspectoría de San Vicente Ferrer, donde sus clientes ya la esperan.
El tercer recorrido lo hace el sábado, inicia en la colonia Francisco Sarabia y de ahí transita por varias calles del Centro de la ciudad a donde lleva los pequeños rollos de flores que adornan oficinas, comercios y domicilios particulares.
María Luisa González Flores asegura que esta actividad la continuará realizando mientras las fuerzas se lo permitan, pues dice que a pesar de esta pandemia, no ha suspendido sus actividades, se protege con cubrebocas y así visita varias decenas de domicilios donde sus clientes ya la esperan.