El presidente Andrés Manuel López Obrador presentó en su segundo informe de gobierno la realidad de dos Méxicos diferentes, “Un México en donde él vive y el otro México en donde vivimos todos los demás ciudadanos, porque las cifras no cuadran con lo que está pasando en la nación”, aseveró Herminio Sánchez de La Barquera, Decano de Ciencias Sociales de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
Señaló que fue una “especie de mañanera comprimida, leída a toda velocidad”, en donde no se encontró nada nuevo. El formato del informe está rebasado. Ya no funciona como está.
Volvió a aparecer la información del presidente de que cuenta “con otros datos”, muy diferentes a lo que se está percibiendo como sociedad. Como es el supuesto ahorro de más de 500 mil millones de pesos por el combate a la corrupción, porque no se tiene información de dónde salió esa cifra y de casos similares como el número de elementos que conforman la Guardia Nacional; datos que vale la pena cotejar con los anexos porque hay grandes diferencias de lo que se dijo y lo que aparece.
Sánchez de la Barquera, señaló que, para la población en estos momentos, las principales preocupaciones son la pandemia, que fue poco comentada por el presidente aun con los más de 65 mil muertos que hay hasta el momento; tampoco habló de las subsecretarías que desaparecen; la crisis económica, la crisis en materia de seguridad y las relaciones con el mundo exterior, en donde actualmente se reducen en la relación que se mantiene con los Estados Unidos.
El gobierno de México no tiene un rumbo claro, carece de una estrategia de gobierno, el presidente Andrés Manuel López debe estar preocupado por los resultados que está entregando a los mexicanos, refirió Sánchez de la Barquera.
En su intervención, Juan Carlos Botello Osorio, director de la Facultad de Comercio y Estrategia Internacional de la UPAEP, manifestó que el segundo informe se convirtió en una “mini-mañanera, en un discurso más”, en donde quiso llamar la atención con su discurso sustentado en el combate a la corrupción que a lo largo de su administración ha sido su bandera insignia.
Botello Osorio señaló que el presidente de México lleva dos años manejando el mismo discurso del combate a la corrupción, ya muestra signos de desgaste político. Y cuando el presidente reconoce que se está ante dos crisis importantes que son la pandemia y la económica que también está afectando al país, y que se está saliendo de ellas, todo indica lo contrario, porque apenas estamos entrando en los estragos que están ocasionando para la nación con todas sus consecuencias.
Advirtió que si se sumara el número de muertos que se tienen, producto de la pandemia del Covid-19 y por la inseguridad que se vive en el país, estamos llegando a casi 130 mil muertos, cifras que rebasan a las registradas por sexenios anteriores. Agregó que “en estos momentos estamos atravesando por una gran crisis en el sistema de salud en México; como son la falta de medicamentos y atención que está recibiendo la población al día de hoy por otros padecimientos”.
Juan Carlos Botello, cuestionó qué va a pasar cuando al gobierno del presidente Andrés Manuel López, se le acabe el dinero que está entregando a los sectores sociales más vulnerables, que no cuenta con un patrón de registro, con una política pública que registre cómo se están entregando estos recursos, lo que demuestra un serio problema en la administración de los recursos por parte del gobierno federal.
Por su parte, Valente Tallabs González, director de la Facultad de Ciencia Política y Gobierno de la UPAEP, lamentó que el tema de la seguridad tenga más puntos obscuros que claros, y que no tenga un papel relevante en la agenda del presidente, al hablar sólo de las dos crisis principales que mencionó, la económica y la de salud; “el presidente no dimensiona que el tema de la seguridad es una grave crisis que presenta su gobierno, cuando se habla de que hay cerca de 100 personas asesinadas diariamente”.
Subrayó que México vive en un clima de inseguridad y violencia, porque no está entregando buenos resultados en su segundo informe; y esto se debe a que carece de una estrategia y no existe una formalidad de lo que requiere el problema de la seguridad en el país.
Tallabs González, señaló que no ha habido un cambio sustancial en el reglón de los temas de seguridad; se continúa con la misma perspectiva militarista de la que AMLO tanto habló en campaña, criticó y que propuso hacer algo distinto al respecto, la realidad nos indica que seguimos igual, sin grandes cambios.
Dijo que el programa propuesto por el presidente de México en donde se sustentaba cómo se iba a abordar el tema de la violencia y seguridad en el país y de que se iba a disminuir a través de un 80% mediante la aplicación de programas sociales y de un 20% con la intervención de la fuerza pública, hoy podemos decir que es un proyecto que ha fallado, porque aun cuando se ha visto un esfuerzo en inversión social, no se ha visto reflejado en la reducción de la violencia, por lo que hay que replantear lo que se está habiendo hasta el momento.
También asentó que falta mayor claridad entre las funciones que viene ejerciendo el ejército actualmente y en el papel que debe desempeñar la llamada Guardia Nacional, que en la realidad parece ser una sucursal del ejército, sólo que en un proceso de maduración, el cual se ve muy distante de lograrlo.
Mientras que Derzu Daniel Ramírez Ortiz, investigador de la escuela de Relaciones Internacionales de la UPAEP, subrayó que en el segundo informe de gobierno se notó la falta de interés por parte del presidente de México por fortalecer las relaciones internacionales con el exterior, de estrechar lazos con otras naciones.
Derzu Ramírez externó que el segundo informe fue muy autocomplaciente, desconectado de la realidad que se está viviendo en México. Por lo que comentó que a las universidades y a los académicos les corresponde evaluar cuál es el estado de la nación y proponer alternativas de solución.
Señaló que la relación política de los Estados Unidos con México ha sido totalmente pragmática, en el sentido de que el gobierno mexicano ha cedido muchas concesiones ante las presiones de Donald Trump.
Indicó que también México ha concedido con muchas concesiones a favor del gobierno de los Estados Unidos en el ámbito comercial, para que el congreso estadounidense ratificara el nuevo acuerdo comercial del T-MEC.
Ramírez Ortiz, expresó que si se hablara de los logros que ha tenido el actual gobierno federal, sólo sería uno y es la puesta en marcha del T-MEC, toda vez que las demás propuestas y acciones del gobierno se basan en información que carece de sustentabilidad, ya que falta claridad en los datos y toda la información que se comparte todas las mañanas, se da de manera parcial.
Por último, dijo que la estrategia de información que han venido manejando las autoridades federales y autoridades estatales, es información no certera, poco clara; y “si nos referimos al tema de la pandemia sanitaria es poco clara con respecto al número de muertos que van hasta el momento”, señaló el internacionalista.
